Las fracturas por estrés en Las Rozas y Majadahonda, son lesiones óseas comunes en deportistas y personas que realizan actividades de alto impacto. A diferencia de una fractura traumática, estas lesiones se desarrollan de manera progresiva debido a sobrecarga repetitiva sobre el hueso, lo que genera pequeñas fisuras que pueden provocar dolor y limitación funcional.
Si has sido diagnosticado con una fractura por estrés y buscas un tratamiento eficaz, en Corpovita te ofrecemos un plan de fisioterapia personalizado para acelerar tu recuperación y fortalecer la zona afectada. En este artículo, te explicamos cómo la fisioterapia te ayuda a sanar de manera segura y a prevenir futuras lesiones.
¿Qué es una fractura por estrés y por qué ocurre?
Una fractura por estrés es una pequeña fisura en el hueso que aparece debido a un esfuerzo repetitivo y prolongado, sin que haya un traumatismo directo. Estas fracturas son frecuentes en atletas, bailarines y corredores, así como en personas con un aumento brusco de actividad física.
Causas principales de una fractura por estrés
- Sobrecarga excesiva y repetitiva en el hueso.
- Aumento repentino de la intensidad del entrenamiento sin una progresión adecuada.
- Técnica incorrecta en el ejercicio o mala biomecánica.
- Déficit de calcio y vitamina D, que debilita la resistencia ósea.
- Uso inadecuado del calzado deportivo, que no absorbe bien el impacto.
Síntomas de una fractura por estrés
- Dolor localizado que empeora con la actividad y mejora con el reposo.
- Inflamación y sensibilidad en la zona afectada.
- Posible enrojecimiento o hinchazón leve.
- En casos avanzados, dolor incluso en reposo.
El diagnóstico se realiza a través de pruebas como radiografías o resonancias magnéticas, ya que en las primeras fases la fisura puede no ser visible en una radiografía convencional.
¿Cómo ayuda la fisioterapia en la recuperación de una fractura por estrés?
El tratamiento fisioterapéutico para una fractura por estrés tiene como objetivos:
- Reducir el dolor y la inflamación.
- Favorecer la regeneración ósea y la cicatrización.
- Recuperar la movilidad y la fuerza en la zona afectada.
- Reeducar la técnica de movimiento para prevenir recaídas.
En Corpovita, diseñamos un plan de rehabilitación personalizado, adaptado a la fase de recuperación en la que te encuentres.
Fases de la recuperación y tratamiento fisioterapéutico
1. Fase inicial: control del dolor y protección del hueso
(Primeras 4-6 semanas)
En esta etapa, el objetivo es permitir la consolidación de la fractura mientras se minimiza el dolor y la inflamación. Para ello:
- Se recomienda reposo relativo o reducción de la carga sobre la zona afectada. En algunos casos, se puede necesitar uso de muletas o inmovilización parcial.
- Aplicamos electroterapia y crioterapia (frío) para aliviar el dolor.
- Trabajamos con movilización pasiva y activa de las articulaciones cercanas para evitar la rigidez.
2. Fase intermedia: recuperación de movilidad y fuerza
(A partir de la 6ª semana, según evolución)
Una vez que la fractura comienza a consolidarse, iniciamos ejercicios para recuperar la movilidad, fuerza y resistencia.
- Ejercicios de bajo impacto (como bicicleta o ejercicios en piscina) para mantener la condición física sin afectar la zona lesionada.
- Ejercicios de fortalecimiento progresivo, empezando por músculos estabilizadores.
- Trabajo de propiocepción para mejorar la estabilidad y evitar desequilibrios musculares.
3. Fase avanzada: vuelta a la actividad y prevención de recaídas
(3-4 meses después de la lesión)
Aquí trabajamos en la reeducación del gesto deportivo y el fortalecimiento del hueso para evitar nuevas fracturas.
- Ejercicios de impacto progresivo para que el hueso se adapte a la carga.
- Corrección biomecánica y técnica deportiva para evitar errores en el movimiento.
- Revisión de factores de riesgo, como alimentación, descanso y equipamiento adecuado (calzado, superficies de entrenamiento, etc.).
Beneficios de la fisioterapia en la recuperación de una fractura por estrés
Un programa de fisioterapia adecuado permite:
- Acelerar la consolidación ósea.
- Evitar la pérdida de masa muscular y movilidad.
- Mejorar la resistencia ósea y prevenir futuras fracturas.
- Garantizar un retorno seguro a la actividad física.
Conclusión
La fisioterapia juega un papel fundamental en la recuperación de una fractura por estrés, ayudando a reducir el dolor, recuperar la fuerza y prevenir nuevas lesiones. En Corpovita Las Rozas y Majadahonda, contamos con fisioterapeutas especializados en rehabilitación deportiva y lesiones óseas, ofreciendo un tratamiento personalizado para que vuelvas a tu actividad con seguridad. Si sufres una fractura por estrés o necesitas asesoramiento sobre cómo prevenirlas, contáctanos y empieza tu recuperación con los mejores profesionales. ¡Tu cuerpo te lo agradecerá!